En 1972 dado que la capilla se había que dado pequeña por la asistencia de fieles, y presentaba dificultades en la entrada y salida de los coches y para evitar que con las lluvias los feligreses se mojaran, se agrando la capilla y realizando la construcción de una nueva verja.
El padre José Antonio Gimeno quien tomo posesión del templo el 20 de septiembre de este mismo año, lo primero que hizo fue terminar de pintar y adecentar la capilla recientemente agrandada, y organizar todas las obras espirituales de la parroquia catecismo, misa de juventud, etc.
Existían en la parroquia dos sectores significativamente dispares, feligreses pudientes y feligreses muy pobres, se procuro que ambos grupos sociales se integraran al máximo a la vida parroquial.
A pesar de haber agrandado la capilla seguía siendo insuficiente y pensó edificar la iglesia definitiva pero se encontraban en dificultades. Al fin como solución para unos años se decidió convertir el salón parroquial en iglesia
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